El amplio término de Villena, el segundo mayor de la provincia, destaca por la gran variedad de especies de aves que encontramos a lo largo del año, siendo estas el objetivo de una disciplina turística sostenible y respetuosa con la naturaleza: el turismo de observación de aves, conocido en inglés como Birding o Birdwatching.

Buena prueba de la importancia ambiental del término municipal de Villena es el elevado porcentaje de superficie protegida incluida en la Red Natura 2000 de la Unión Europea, a través de 4 figuras de protección: ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves), LIC (Lugar de Interés Comunitario), Microreservas de Flora y Reservas de Fauna, siendo los principales hábitats presentes los siguientes:

ESTEPA

De cara a la observación de aves, Villena posee las mejores zonas de estepa y campos de cereal de la provincia de Alicante, destacando el Valle de los Alhorines. Fue aquí donde, a principios de siglo, se reintrodujo con notable éxito el Cernícalo primilla, que utiliza los tejados de antiguas edificaciones para criar y sobrevuela los campos adyacentes. También encontramos otras especies como la Ganga ibérica, los Sisones y Alcaravanes, Aguiluchos cenizos, Collalbas grises, Calandrias, Trigueros o de manera más esporádica, la Ganga ortega y la increíble Avutarda.

MONTAÑA

Destacan la Peña Rubia, los Picachos de Cabrera, el Morrón o la sierra de Salinas, lugar esta último de gran importancia por su buen estado de conservación y donde encontramos la cota más alta del municipio, 1.238 metros en La Capilla. Estas zonas de pinares y carrascas de gran belleza, a menudo con cultivos en terraza asociados a ellas, albergan una gran variedad de especies entre las que destacan la majestuosa Águila real o el Búho real junto a Arrendajos, los pequeños Chochines, Collalbas negras, Currucas carrasqueñas, Oropéndolas, los Agateadores comunes u otra de nuestras rapaces nocturnas, el Cárabo.

SALADAR

Las zonas de saladar, aparentemente yermas, contienen sin embargo un interesantísimo patrimonio ambiental debido tanto a las especies de aves presentes en ella como a la singularidad de las plantas que crecen en estas zonas. La antigua laguna de Villena, antaño apreciada por su gran población de aves acuáticas y hoy desecada, permite la observación a lo largo del año de distintas especies como son los Chorlitejos chicos, Cigüeñuelas, Buitrones, Alcaudones reales, Terreras marismeñas, Collalbas rubias o Abejarucos.